lunes, 16 de enero de 2012

Way too small

Infinitamente. Así, queriendo que de mi boca saliera algo inteligente. Tratando siempre de ser impresionante, impresionantemente estúpida al final. Quedándome callada, significando mucho menos, pero en una zona de seguridad infinita. Infinitamente.

Y que te mire a los ojos, te diga un bla bla bla y sonrías, sí, sonrías. Compartas conmigo todo lo que en mi mente tiene gracia y fluidez, pero no en mi voz. Quedándome quieta, amagando que voy a salir corriendo, pero aún así, frente a frente, esquivando las urgencias de la timidez.

Estas ahí en tu lugar, en tu espacio, siendo la burbuja que separa mis pensamientos de mi accionar y deteniendo con tus manos la inercia del pasado. Significando mucho menos, sigo siendo sólo lo que le pone algo de color a tus pisadas, y más que eso no alcanzo a ser (ver).

En realidad, quiero cambiar el panorama.

Y en realidad, no cambia nada.

Infinitamente, sólo se ser ese pequeño lápiz que dibuja hacia ambos lados de lo que es en realidad.

No hay comentarios: